Alojarse con una familia de acogida nativa es la forma más interesante de aprender inglés, además de una experiencia inolvidable a nivel personal. No obstante, siempre se necesita un tiempo de adaptación. Para que puedas superar esas dificultades iniciales, te damos unos consejos.
Llevar un regalo para la familia de acogida es una buena forma de romper el hielo. No tiene que ser caro. Puede ser algo relacionado con tus raíces culturales, con España o con tu ciudad natal (un libro, música, o por qué no, comida?)
Una de las dificultades que refieren algunos de nuestros estudiantes es que, cuando llegan, les cuesta entender todo y comunicarse con fluidez. Es normal, si estás en Irlanda con una familia de acogida, es porque quieres mejorar tu nivel de inglés. Por eso lo mejor es tener una actitud positiva y participativa que favorezca la convivencia y la confianza en ti mismo. La fluidez llegará sin que te des cuenta.
No te sientas vergonzoso al hablar de tus gustos, tus aficiones, tu carácter o tus comidas favoritas. La familia no sabe nada de ti y esto les ayudará a relacionarse mejor contigo. Las familias que forman parte de Ireland Experience son abiertas y muy hospitalarias, y solo quieren que te sientas bien.
Por otra parte, tendrás que corresponder con algunos gestos que harán que la experiencia sea recíproca. Mantén tu habitación ordenada, participa en las comidas familiares y respeta los horarios (en ocasiones muy distintos a los españoles). En definitiva, acepta las diferencias que irás descubriendo. Las diferencias son, precisamente, lo que más enriquece la experiencia. Conocer y apreciar una cultura, música o gastronomía diferente a la nuestra hará que las dificultades iniciales desaparezcan en unos días, y sin darte cuenta también mejorarás tu inglés, tu fluidez, tu vocabulario, etc.
En Ireland Experience intentamos que nuestros estudiantes disfruten de la cultura y tradiciones irlandesas. Contacte con nosotros. Estamos en Cork.
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